¿Libertad de prensa?, la lucha en nuestro tiempo
Comunicadores comparten los desafíos que enfrentan en Puerto Rico y El Salvador.
Ante los grandes desafíos que enfrentan los profesionales de las comunicaciones, particularmente en el mundo periodístico y frente a la realidad actual, la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico abrió un espacio para discutir sobre la libertad de prensa como garantía de la democracia.
Ante esto, se celebró el conversatorio ¿Libertad de prensa?, la lucha en nuestro tiempo el 18 de marzo de 2021 por Zoom. La presidenta de la Asociación de Periodistas de Puerto Rico (ASPPRO), Damaris Suárez, exploró el cuadro actual del periodismo en la Isla y habló sobre los retos de hoy que viven estos profesionales en Puerto Rico, mientras que el licenciado Frank Alemán, profesor de Periodismo en la Universidad Católica de El Salvador presentó una radiografía del ejercicio periodístico en ese país.
Damaris Suárez , quien también es periodista del Centro de Periodismo Investigativo (CPI) sostuvo “En Puerto Rico, desde hace unos años, se han tomado la iniciativa algunos funcionarios de mirar la credibilidad de los periodistas, a tono con las investigaciones y las reseñas periodísticas. La información es de todos y le pertenece al pueblo, no al gobernante. Aquí, hasta el 2019, con la salida del pasado gobernador Ricardo Rosselló, teníamos una decisión del Tribunal Supremo, basada en el reconocimiento del acceso a la información como un derecho. Antes no teníamos una ley de transparencia. En Puerto Rico se aprobó la Ley número 122 del 2019 que se llama la Ley de Datos Abiertos del Gobierno y la Ley 141 que se llama Ley de Transparencia y Procedimientos Expeditos para el Acceso a la Información Pública. Estas dos leyes amplían cerca de 17 excepciones que, supuestamente, son confidenciales. Además, imponen restricciones que no estaban antes. Entre los muchos aspectos, no define necesariamente la información pública de forma adecuada y elimina totalmente las peticiones verbales y la entrega inmediata del gobierno al periodista, entre otras. El Centro de Periodismo Investigativo (CPI) acudió constantemente al Tribunal y todas las demandas las hemos ganado, porque el Gobierno pone excusas para proveer la información pública. Así, en nuestra lucha por la libertad de prensa, vivimos una seria cultura de opacidad del gobierno, a pesar de estas leyes en un país democrático” .
La periodista igualmente resaltó “Aunque no lo crean, en Puerto Rico también sufrimos de presiones, amenazas de llamadas a centros de redacción, comunicaciones con los jefes editores quejándose por el contenido cuando los datos son correctos, incluso cartas amenazantes de abogados y la radicación de demandas frívolas para presionar a periodistas. Hay una serie de ‘trollers’ o cuentas falsas que se identifican con partidos y estas publicaciones se vuelven virales para intimidar al periodista y minar la credibilidad de la información. Se da mucho en redes sociales y lo vemos en casos como ilegalidades, lavado de dinero, etc. La Asociación de Periodistas ha radicado querellas por intimidación y ninguna ha prosperado. La realidad es que estamos muy lejos de tener un trabajo de ensueño y cada vez es más este asunto de intimidación y las acciones para descarrillar nuestro trabajo”.
De hecho, el profesor de Periodismo en la Universidad Católica de El Salvador, licenciado Frank Alemán explicó que El Salvador, el país más pequeño de América Latina, a lo largo de su historia ha tenido grandes retos y desafíos en materia del ejercicio periodístico. “Desde los inicios empíricos, hasta la transformación y profesionalización del sector en tiempos del conflicto armado (1980-1992) la importancia de la labor, la apertura y algunos abusos durante la guerra, en lugar de apagar los deseos de muchos jóvenes de convertirse en periodistas, los avivó. Llegados los acuerdos de paz, los medios de comunicación crecieron en número y en personal, dando paso a una generación de comunicadores con experiencia y formadores de nuevos periodistas. Con los cambios generacionales y de desarrollo del país, los medios cumplieron un rol importante en la transmisión de toda la posguerra: los beneficios y los abusos hacia la población ahora tenían muchas más plataformas por las cuales poder transmitirse. La limitación a la libertad de expresión es inconstitucional en El Salvador, pero el abuso de esa libertad también es penado ante las leyes”.
El comunicador igualmente sostuvo que, actualmente, El Salvador cuenta con una Ley de Acceso a la Información Pública y un Tribunal de Ética Gubernamental, los cuales se convierten en herramientas indispensables del periodista al momento de buscar información y datos que corroboren el correcto o mal desempeño de la función pública. Sin embargo, afirmó “Pese a esas herramientas, en los últimos años el gremio periodístico ha denunciado, a nivel nacional e internacional, algunos hechos que ponen de manifiesto la intención de algunas instituciones o funcionarios de limitar la labor de los medios; incluso, una de las denuncias ante la CIDH, ya cuenta con una medida cautelar de protección para 34 empleados de uno de los medios salvadoreños. Esto, por considerar que esos empleados tienen riesgo durante el ejercicio del periodismo en el país”.
El director del Instituto de Doctrina Social de la Iglesia de la PUCPR, licenciado Israel Santiago Lugo explicó “La libertad de prensa es una herramienta que garantiza la vida democrática. La prensa libre ejerce un rol indelegable para la salud de la cosa pública: la fiscalización de la gestión gubernamental. A través de la gestión fiscalizadora se promueve el respeto a los derechos humanos y a la promoción del bien común. A lo largo del tiempo, la gestión de la prensa se ha visto obstaculizada por parte de los gobiernos en Puerto Rico y Latinoamérica. Los retos de la prensa van desde la violencia expresa hasta el diseño de leyes y reglamentos que no permiten acceso libre a la información gubernamental. Además, la profunda división política y el fanatismo de nuestras sociedades también atentan contra el ejercicio libre y neutral de los periodistas. Como si fuera poco, los desarrollos acelerados en la informática y el fenómeno de las redes sociales han complicado aún más su trabajo. Ante esto, el Instituto de Doctrina Social de la Iglesia de la PUCPR, reúne a estos expertos para discutir este tema”.