“Defensora del valor de la vida, pionera de la investigación bioética”

Cabo Rojo, Mayagüez, Ponce y todo Puerto Rico le dicen hasta luego. Pero su huella sigue latente por su pasión, su amor, por la defensa de la dignidad del ser humano y por sus grandes aportaciones a la investigación y a la academia.  Hoy, la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico aplaude su gesta profesional y religiosa.  Se trata de la hermana Elena Lugo.  Nació en San Juan en 1938.   En 1961 se licenció en teología con especialización en sociología y psicología.  Años más tarde, culminó estudios de posgrado en la Universidad de Georgetown en Washington con un doctorado en Filosofía.

La hermana Elena Lugo, quien se destacó primero como profesora en la UPR de Mayagüez, se adentró en la vida religiosa y se convirtió en miembro del Instituto Secular de las Hermanas de María de Shoensttat a los 37 años.

“La hermana Elena Lugo me impactó mucho como mujer profesional.  La recuerdo sumamente elegante cuando era decana de Artes y Ciencias del recinto de Mayagüez de la UPR.  También me impactó como mujer consagrada a la misión de Schoenstatt.  Ella vivía para la misión del fundador, padre José Kentenich. Se fascinó con la misión y nunca se desvió de ese camino. Y encontraba cómo traducir los principios católicos a la vida”, expresó la hermana Nancy Arroyo, directora del Centro de Enseñanza e Investigación en Biotecnología y Agrobiotecnología y hermana de la comunidad de Shoensttat.

La hermana Lugo fue pionera en la enseñanza y en las investigaciones de la bioética en Puerto Rico.  Creó en la UPR de Mayagüez el Centro de Ética de las Profesiones con el fin de enseñar la ética en campos como ingeniería, medicina, política, economía, entre otros.  Igualmente, fue miembro fundador de la Federación Puertorriqueña de Bioética. Se distinguió como na de las voces fuertes en la organización de congresos, simposios y eventos de carácter internacional sobre el tema de la bioética.

Fue nombrada también, miembro correspondiente de la Academia Pontificia para la Vida en 2002 como asesora de Roma en temas de bioética.  Tras su retiro de la academia, trabajó en Argentina con otra de sus creaciones, la Comisión de Bioética padre José Kentenich, siguiendo el pensamiento del fundador de su movimiento apostólico.    Más tarde, en Puerto Rico también, fundó el Instituto de Pedagogía padre José Kentenich.

Como experta en bioética apoyó a la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico a impartir conferencias y seminarios.  Asimismo, diseñó cursos de bachillerato y maestría en el tema.

El presidente de la PUCPR, Dr. Jorge Iván Vélez Arocho, expresó “Me uno a la muy querida familia de Schoenstatt ante la tristeza y el vacío por el fallecimiento de la querida y recordada hermana Elena Lugo. La Dra. Elena Lugo sirvió generosamente y de muchas maneras a la Iglesia que peregrina en Puerto Rico, en América Latina y en el Caribe. Su dedicación seria al estudio de la filosofía y de la bioética en el campus de Mayagüez de la Universidad de Puerto Rico y en la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico la convirtieron en un referente obligado en nuestras agendas universitarias. Sus servicios en cursos universitarios, seminarios, conferencias, foros, congresos y comités de ética fueron muy apreciados.  Siempre estuvo disponible para compartir sus conocimientos y pasión por estos dos importantes campos.”