Diócesis de Ponce actualiza protocolo para las celebraciones con el pueblo ante la pandemia.
El documento se basa en lo dispuesto por la nueva Orden Administrativa del Departamento de Salud.
El protocolo actualizado, firmado por Mons. Juan Rodríguez Orengo, vicario de pastoral de la diócesis de Ponce, se basa en cuatro puntos: las disposiciones generales, las celebraciones litúrgicas, en particular la Eucaristía, la dispensa del precepto dominical, la concesión de recurrir a la absolución general de los fieles y la cuarentena. Entre las disposiciones generales, el vicario menciona “Recordemos que la pandemia no ha terminado totalmente, por tanto, debemos mantener las precauciones de higiene como el lavado adecuado de manos, desinfección, así como el distanciamiento físico de 6 pies entre quienes no habiten bajo el mismo techo”. Además, indicó “Para quienes participen de las celebraciones o reuniones en lugares cerrados, incluyendo sacerdotes, diáconos, lectores, ministros extraordinarios de la comunión, y coros, deberán seguir usando una mascarilla adecuada, aunque estén vacunados y más aun los que no se hayan vacunado, en particular los menores, que aún no han podido ser vacunados. No solo debemos cuidarnos nosotros, sino cuidar a los otros”. El protocolo estipula que se autoriza a superar el aforo de 50% en los lugares cerrados de celebración o reunión, pero cuidando lo establecido. Para las celebraciones al aire libre no hay límites de aforo ni se requiere la mascarilla.
“Algunas de las precauciones que hemos tomado se deben mantener, por ejemplo, mantener la circulación de aire y mantenimiento de los filtros de los acondicionadores de aire de las iglesias y lugares de reunión; no besar el sagrario ni las imágenes de los santos y santas, así como cuidar el distanciamiento en la fila para la Comunión y desinfección de las manos antes de recibir el Santísimo. Tomar la temperatura a los asistentes a las celebraciones u otros encuentros antes de entrar a los mismos es opcional. Seguimos exhortando a todos los fieles a aprovechar la oportunidad que se nos ha dado de ser vacunados, por su bien y por el de los demás” indicó el vicario.
Sobre las celebraciones litúrgicas, en particular la Eucaristía, sostuvo “Si los ministros que participan de la celebración, entiéndase sacerdote y/o diácono, están vacunados pueden hacer el gesto de besar del altar y el evangeliario o el leccionario, pero con la mascarilla y mantenerla aun en la predicación. También se podrán asignar las lecturas a más de un lector, manteniendo la mascarilla incluso para proclamar la Palabra. Por precaución, sigan desinfectando las manos con sanitizer o alcohol antes de administrar la Comunión, que de momento seguirá siendo en la mano”.
En cuanto al precepto dominical, la absolución general y la reconciliación individual indicó “Se mantienen la dispensa del precepto dominical y la concesión de recurrir a la absolución general de los fieles hasta nuevo aviso”.
“Quien sospeche haberse expuesto a alguien con COVID deberá guardar una cuarentena de 14 días y los afectados por el virus deberán aislarse por 10 días desde que hayan percibido los síntomas. Con todo, si se identifica un caso positivo de alguien que haya participado de una celebración en la parroquia no será necesario cerrar la misma al culto, sino seguir las medidas de higiene y precaución ya mencionadas” expresó.
Para ver el documento en su totalidad oprime aquí